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sábado, 21 de junio de 2014

Pulsera de bolillos

Hoy estrenamos una nueva sección la de las pulseras, que ya le tenía yo ganas. Para empezar con ella, os traigo una  pulsera muy especial hecha de encaje de bolillos, a la medida y del color favorito de la que es su dueña ahora, mi queridísima Dawn.

Creo que estas cosas, no sólo por su exquisito acabado y su belleza singular, sino también por su ponibilidad y adaptabilidad a numerosos eventos de la vida cotidiana estarán siempre de moda, la dificultad será encontrar alguien que sepa hacerlo (porque eso sí que va por modas).

Como sabréis los que me vais siguiendo, una de mis últimas aficiones desde el año pasado, es el encaje de bolillos. Gracias a mi profesora y compañeras de “La Asociación de bolilleras de Elche y comarca”, guardo un grato recuerdo de todas ellas, alguna que otra amiga, mil y un consejos y ¿cómo no? Algunos patrones para seguir haciendo aunque sea en la lejanía, encaje de bolillos…


   

Esta vez, para agradecer toda la amabilidad y el buen recibimiento que nos dió Dawn en el Reino Unido quería hacerle algo que fuera “nuestro”, algo típico en muchos pueblos de España que muchas antepasadas nuestras hacían apoyadas con su bolillero en las rejas de sus ventanas. Algo que llevase tiempo, dedicación, personalizado y ¡por supuesto, con infinidad de cariño!

  

Usé un color verde botella o verde oscuro, según la persona y los ojos que lo miren, elegí ése porque era su favorito. Y le engarcé unas piedras, al tiempo que hacía el encaje de bolillos, (es decir, que no van cosidas).
Para terminar, elegí el broche de la pulsera. Y éste fue el resultado:

 

 

Ésta pulsera en concreto, lleva los puntos que nosotras comúnmente los llamamos:  torchón y arañas,( con la dificultad añadida de ir engarzando las piedras en el centro de las arañas, una sí y otra no).

 

Aquí os muestro otra pulsera que hice antes. 

 

 

Que tiene un valor sentimental para mi muy grande, no sólo porque fue la primera que hice y porque lleva un punto con una especial complicación (como lo son “las hojas de guipur” ) si no porque me lo hice especialmente pensando en una ocasión la boda de mi hermano, donde la estrené a juego con el vestido, por supuesto.
 

 

Bueno, como siempre un placer escribiros, espero que os haya gustado y ¡hasta la semana que viene!

sábado, 29 de marzo de 2014

Un pañuelo hecho a bolillos que se puede convertir en un broche

Ésta es otra de las aficiones que se me ocurrieron de la noche a la mañana después de oír un día tras otro a mi madre diciendo que quería aprender hacer bolillos pero que era una cosa que no era fácil ni accesible para ella.

Y por esas cosas de la vida, el año pasado en Elche me encontré con la "Asociación de bolilleras de Elche y comarca" en una feria de artesanía o en la concentración anual de bolilleras, no lo recuerdo bien. Pero desde ese mismo instante pensé que el mejor regalo que le podía hacer a mi madre era enseñarle yo misma hacer bolillos. Así que no lo pensé más y me puse en contacto con ellas y con “la profe”, Antonia, y me puse al lío.

Gracias, Antonia, por ser tan buena profesora, por enseñarnos tantas y tantas cosas, por ser tan paciente y tan generosa. Gracias de corazón.

Empecé con un marcapáginas (como empieza la mayoría): puntos básicos y algo facilito.

Y la segunda cosa que hice de bolillos fue este pañuelo, que como veis en la siguiente foto tiene su miga, sobre todo en cada esquina.

 


Pero lo que más me sorprendió fue el cambio radical que pegó al volverse un broche, gracias al ingenio y la magia de las manos de Antonia. Como os digo, para algunas cosas hay que tener gracia. 

 

Y ésta es una de las cosas que ya lleva historia, porque fue estrenado como adorno del pelo, es decir, como un tocado en el desfile que realizó la asociación ese año.

El mundo de los bolillos es tan antiguo como gratificante. Es cierto que son muchas horas de trabajo, mucha dedicación y maña, pero cuando acabas "algo" (lo que sea ) es tan gratificante... Y claro, ahora entiendo por qué las cosas de bolillos son siempre tan caras: ¡es que no hay dinero con el que pagar tanto trabajo!

Bueno, espero que os haya gustado. Aquí no os doy indicaciones porque no es algo que se pueda enseñar fácilmente. Se necesitan horas de entrenamiento, constancia y una buena profesora como la mía.

Un abrazo y ¡hasta la semana que viene!
Free Cow Boy MySpace Cursors at www.totallyfreecursors.com